No me fui.
Sigo acá, soñando. Tratando de liberar todo eso que llaman energía. Las palabras se hicieron para transformar sueños y realidades, eso es lo que a veces busco hacer.
A veces a escondidas, sueño con ése único instante que me hará feliz.
Ya no me lamento por hechos que borraron mi sonrisa, busco en ellos el mejor escudo para seguir de pie. No hay oscuridad que dure cien años, no hay tristeza que aturda para siempre. Hay encuentros y hay despedidas, hay caminos y hay desvíos que tarde o temprano aparecen para enseñarte que no eres inmortal, sino un cuerpo lleno de fortaleza capaz de caer pero incapaz de rendirse.

Comentarios

Entradas populares de este blog

“El peor sentimiento es no saber si esperar un poco más o rendirse”

Yo se que a veces gano cuando pierdo.